La opción de cursar el diploma del Bachillerato Internacional se vislumbra cuando el alumno termina la etapa de secundaria y llega el momento de pasar a bachillerato.
Es una decisión que hay que barajar y pensar bien ya que depende mucho del perfil del alumno y de sus aptitudes.
El Bachillerato Internacional fue fundado a finales de los años 60 en Suiza y está instaurado en más de 4.500 colegios públicos y privados del mundo.
Lo imparten un total de 70.000 docentes y lo estudian más de un millón de alumnos. Dependiendo del país, suelen ofrecerse en español, inglés y francés.
En España hay alrededor de 100 colegios que ofrecen la posibilidad de cursar este tipo de bachillerato. El objetivo principal de este tipo de educación es avivar las habilidades intelectuales, personales, emocionales y sociales de los escolares.
El Bachillerato Internacional apuesta por una visión global y permite terminar los estudios con una proyección internacional y multicultural.
Este tipo de educación persigue la mejora continua del alumnado, ya que promueve que piensen de forma autónoma y sean capaces de manejar su propio estudio.
Además de la faceta didáctica, el Bachillerato Internacional busca educar a su alumnado en valores realizando distintas actividades solidarias, por las que los estudiantes recibirán créditos. Ayuda a la hora de acceder a universidades extranjeras y nacionales y las evaluaciones de sus pruebas finales las corrigen profesores de otros países.
Una de sus características principales es que impulsa mucho la participación en equipos y en distintos trabajos buscando así la mejora continua. Este tipo de tareas implican indagar mucho en la materia sobre la que se va realizar el trabajo, aportar textos válidos que avalen tu tesis y contar con una perfecta redacción y relación de fuentes.
El currículo completo del diploma está formado por seis asignaturas y los componentes troncales, que ahora explicaremos.
Las seis asignaturas se estudian a lo largo de los dos años del diploma y pertenecen a estos grupos:
Cada estudiante cursará tres asignaturas en nivel superior (240 horas lectivas) y tres en nivel medio (150 horas lectivas).
Aparte de las asignaturas están los componentes troncales: Teoría del Conocimiento, Creatividad, actividad y servicio (CAS) y la Monografía.
Estudiar el Bachillerato Internacional trae consigo distintas ventajas a los alumnos, que les servirán para el resto de su vida.
Cursar el Bachillerato Internacional permite trabajar en una universidad extranjera. Hay algunas en las que solo se requiere tener el diploma y otras en las que hay que alcanzar una nota media y una nota mínima en determinadas asignaturas.
En el caso de querer estudiar en una universidad española, el diploma permite acceder siempre y cuando la nota de equivalente entre el bachillerato internacional y el español sea superior a la nota de corte de la universidad en cuestión. De esta forma, el alumno termina con dos diplomas.
En definitiva, cursar este tipo de estudios es una gran oportunidad para que los niños ganen autonomía, disciplina y conciencia solidaria.
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