Suiza es un país que apuesta por la competitividad, la calidad y la innovación. Por este motivo, resulta un destino muy atractivo para las economías más pudientes del mundo a la hora de educar a sus hijos.
La educación de los hijos es una de las decisiones más importantes de los padres. De hecho, hay algunos que se pueden permitir elegir la educación más exclusiva para sus vástagos en Suiza.
Uno de los motivos por los que los progenitores eligen Suiza para educar a sus hijos es su disciplina y su alto nivel educativo.
El informe del 2016 del Foro Económico Mundial situó a Suiza en el tercer puesto del ranking mundial de los países con mejor sistema educativo, por detrás de Finlandia y Noruega. Los estudiantes suizos superan la media europea en su nivel de matemáticas y ciencias.
En los colegios suizos se fomenta el equilibrio entre los programas escolares, artísticos y deportivos. El sistema educativo suizo invita a la curiosidad y a desarrollar el talento en las artes, la música, las matemáticas, complementándolo con el deporte y el tiempo libre.
Por otro lado, Suiza cuenta con una gran oferta de colegios internacionales y privados que también permiten cursar el bachillerato internacional.
Los progenitores pueden optar por un colegio bilingüe en el que se imparten las clases en inglés y en francés.
En las aulas suizas existe un ratio bajo de profesor y alumno. Esto permite que el profesor se pueda dedicar de una forma más exclusiva a cada uno de los menores.
Además, en los colegios suizos hay una gran influencia del método Montessori que busca fomentar el potencial de cada niño dentro de un espacio estructurado en colaboración con el adulto.
Los procesos de admisión varían en función del colegio. Hay algunos que exigen una entrevista, un expediente académico brillante, una carta de recomendación, un depósito económico, etc.
Suiza cuenta con una gran cantidad de colegios privados en cuyas aulas se han formado los hijos de personas muy influyentes a nivel mundial: Rainiero de Mónaco, el rey emérito Juan Carlos I, Pierre Casiraghi, los príncipes Luis y Félix de Luxemburgo y los hijos de grandes aristócratas y empresarios europeos.
El colegio Le Rosey, por ejemplo, es conocido como el colegio de los reyes y como el colegio más caro del mundo.
El curso académico en alguno de los colegios más exclusivos de Suiza puede llegar a ascender hasta los 100.000 euros. Este tipo de colegios está reservado para unos pocos que puedan invertir mucho dinero en la educación de sus hijos.
En el país más famoso por sus chocolates no todo es cuestión de dinero. El gobierno suizo destina una gran parte de su presupuesto a la educación. Por este motivo, los niños suizos tienen la posibilidad de acceder a una educación de calidad sin necesidad de que sus padres se gasten una fortuna.
Suiza concede las becas a la excelencia para poder reclutar a estudiantes extranjeros para estudiar en el país. Por tanto, el dinero no es un impedimento para poder formarse en uno de los sistemas de educación más prestigiosos del mundo.
Este país es un buen lugar para salir de tu zona de confort, conocer a personas de otros países y disfrutar de unos bonitos paisajes.
Somos un equipo de consultores de educación con amplia trayectoria en el sector. Ayudamos a familias y profesionales de la educación a desarrollar un plan estructurado para sus hijos o alumnos. #transparencia #educacioninternacional #expertoseneducacion