La vida no se trata de encontrarte a ti mismo, sino de crearte de ti mismo
George Bernard Shaw
Desde hace unos años me gusta ver los años con dos puntos de inflexión importantes: por un lado, el fin de un año y el comienzo de otro, donde solemos hacer balance del año vivido y establecer unos propósitos de año nuevo. Por otro lado, el verano.
Es en esta época del año cuando más desconectamos de la rutina, disfrutamos de largos periodos de vacaciones, de viajes, nos reencontramos con seres queridos y, sobre todo, nos permitimos tener tiempo para nosotros mismos.
El verano es el periodo en el que más desconectamos, en el que la rutina queda en pausa y podemos disfrutar de tiempo de calidad con quienes más queremos. Esta pausa también nos brinda la oportunidad de reflexionar, de hacer un balance de cómo han ido los primeros meses del año y de replantear o enderezar los propósitos que nos pusimos la empezar el año.
Si durante el primer semestre del año te has desviado de tus propósitos, este es el momento ideal para recalibrar y reorientar tu camino. Además, más allá de mirar hacia atrás, este es un tiempo para proyectar hacia el futuro, para pensar en quiénes queremos ser y qué queremos lograr en lo que queda del año.
El verano, con su carácter de pausa, ofrece un momento ideal para replantearnos nuestros propósitos para el nuevo curso. Si bien todos tenemos metas personales, aquí te dejo algunas ideas que pueden inspirarte para reflexionar sobre lo que quieres hacer después del verano.
El deporte y la actividad física son fundamentales no solo para el cuerpo, sino también para la mente. Después del verano, considera incorporar más movimiento en tu vida diaria. Encuentra el deporte que más te guste y practícalo, y sobre todo, asegúrate que disfrutas haciéndolo.
Añade algún día de caminar o incluso de trotar al menos una vez por semana, prueba a inscribirte a algún deporte diferente o utilizar el deporte para poder a tus amigos (¡como echando un buen partido de pádel!).
Además, prueba a hacer yoga, a estirar al final de día o simplemente dedicarte un tiempo para ti para reconectar con tu cuerpo después de todo el día.
El movimiento no solo mejora tu condición física, sino que también es una excelente forma de liberar el estrés acumulado durante el día. Además, los beneficios emocionales de la actividad física son innumerables; te ayudará a sentirte más enérgico, motivado y en sintonía con tus emociones. Considera el deporte no como una obligación, sino como un regalo que te das a ti mismo para cuidarte y reconectar.
El verano puede haberte llevado a lugares nuevos y emocionantes, pero no olvides que la conexión con tu comunidad local es igualmente valiosa. Al regresar de tus viajes o de tus vacaciones, haz un esfuerzo por involucrarte más en tu entorno. Participa en actividades comunitarias, conoce a tus vecinos o únete a iniciativas locales. Estar conectado con tu comunidad te dará un sentido de pertenencia y te permitirá contribuir de manera significativa al lugar donde vives.
Además, el contacto con la comunidad puede ser una excelente manera de mantenerte en contacto con la realidad, de entender mejor los problemas y necesidades de tu entorno y, lo más importante, de ser parte de la solución. Puedes considerar unirte a organizaciones locales, asociaciones juveniles, ONGs, ofrecerte como voluntario en causas que te importen o simplemente pasar más tiempo con personas que comparten tus intereses. Este tipo de conexiones enriquecen tu vida y te ayudan a crecer tanto personal como socialmente.
La creatividad es una habilidad que no solo se relaciona con las artes, sino que puede aplicarse en todos los aspectos de la vida. Después del verano, dedícale tiempo a actividades que estimulen tu imaginación y te permitan expresar tus ideas de manera novedosa. Ya sea a través de la escritura, la pintura, la música o incluso la cocina, encontrar una salida creativa puede ser una forma maravillosa de explorar nuevas facetas de ti mismo.
Algunas ideas pueden ser retomar o empezar a llevar un pequeño diario, pintar mandalas, aprender a hacer macramé o pulseras o apuntarte a un taller de cerámica del barrio (créeme, son divertidísimos!)
El desarrollo de la creatividad no solo es gratificante en lo personal, sino que también puede tener un impacto positivo en tu vida profesional. La capacidad de pensar de manera creativa es cada vez más valorada a la hora de buscar trabajo. Así que, ya sea que quieras mejorar tus habilidades artísticas o simplemente encontrar nuevas formas de resolver problemas, hacer de la creatividad una parte central de tu vida es una excelente decisión para este nuevo curso.
El aprendizaje continuo es esencial para el crecimiento personal y profesional. Después del verano, es importante tener algo que te mantenga activo mentalmente y te haga tener tu rutina de aprender.
Puedes inscribirte en cursos online (hay muchos baratos o incluso gratis), leer libros de temáticas que te interesen, asistir a talleres o seminarios que puedan hacer en la universidad tu ciudad, o incluso aprender un nuevo idioma. Mantener tu mente activa no solo te mantendrá actualizado en lo que te interesa, sino que también te abrirá nuevas oportunidades y perspectivas.
El verano te habrá llenado de nuevas experiencias y probablemente también de curiosidades. No pierdas ese impulso; utilízalo para profundizar en temas que siempre te han interesado o para explorar cosas nuevas. Aprender algo nuevo te mantiene dinámico, flexible y abierto a los cambios, cualidades que son fundamentales en el mundo actual.
Además, el aprendizaje te permitirá mantener una mente joven y ágil, siempre lista para enfrentar nuevos desafíos y aprovechar las oportunidades que se presenten.
El verano es un excelente momento para reflexionar y proyectarse y para hacer ajustes en el camino que has recorrido. Ya sea que te enfoques en mejorar tu bienestar físico, en fortalecer tus lazos comunitarios, en desarrollar tu creatividad o en continuar aprendiendo, lo importante es que tomes decisiones que te acerquen a la vida que deseas vivir. Aprovecha este nuevo curso para redescubrirte, para seguir creciendo y para hacer de cada día una oportunidad para ser mejor. ¡Feliz nuevo curso!
Apasionado por viajar, las culturas y las personas, Sergio es un ingeniero con experiencia en proyectos de cooperación internacional y de impacto social en comunidades por África y América Latina. Trabaja como coordinador de un proyecto de educación en África, ha fundado una ONG que trabaja con jóvenes activistas y ha montado una startup de movilidad sostenible.
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