El otoño es una de las estaciones más románticas del año: hojas caídas que crujen bajo tus pies, el aire fresco con aroma a castañas asadas y las primeras bufandas que anuncian la llegada del frío. Sin embargo, para muchos estudiantes internacionales, esta estación no es solo un cambio estético, sino un desafío cultural y emocional. Pasar del sol constante de un clima cálido a los días grises y más fríos de un otoño europeo, asiático o norteamericano puede ser un ajuste difícil.
Curiosamente, muchas culturas ven el otoño como un tiempo para reflexionar y prepararse para el descanso del invierno. En China, por ejemplo, el Festival del Medio Otoño celebra la conexión familiar y la introspección. En Canadá, el Día de Acción de Gracias marca un momento para expresar gratitud. Como estudiante internacional, este es un buen momento para mirar atrás, apreciar lo aprendido hasta ahora y equiparte para lo que está por venir.
Antes de sumergirte en los desafíos y oportunidades del invierno, tómate un momento para pensar en estas preguntas:
La hoja caída
¡Qué poco a poco, tan leve,
por la blanca luna nueva,
la hoja seca que se mueve
es una estrella!
Y mientras la hoja se aleja
por la calma tan despacio,
del fondo del claro espacio
canta un ave.
Antonio Machado
Aquí tienes estrategias prácticas para prosperar durante esta transición.
El cambio de estaciones no solo afecta al cuerpo, sino también a la mente. Los días más cortos pueden provocar tristeza invernal.
El concepto danés de hygge se centra en disfrutar de la comodidad y la calidez durante los meses fríos. Adopta esta filosofía en tu hogar:
En lugar de evitar el frío, abrázalo. Participa en las actividades de tu ciudad, como mercados navideños, pistas de patinaje sobre hielo o festivales de invierno.
Tómate un momento para reconectar contigo mismo y con la estación:
El otoño y el invierno no son solo estaciones, sino momentos de introspección y renovación. Aunque el frío y los días más cortos pueden parecer intimidantes al principio, también ofrecen una oportunidad única para crecer, experimentar y conectar con un ritmo más lento de vida. Con los recursos, consejos y ejercicios que has leído aquí, estás listo para transformar esta transición en una experiencia memorable y enriquecedora.
Se presenta como nómada, con diez años de experiencia explorando comunidades donde el desarrollo personal, comunitario, ecológico y artístico son los ejes principales. Ha trabajado en países como España, Rumania, Italia y Alemania y actualmente vive y viaja en su furgoneta “Samsara” co-diseñando proyectos regenerativos y residencias artísticas para zonas rurales, organizaciones y ecoaldeas. Todo lo que hace está ligado a su propósito: “conectar a la gente consigo misma, con las demás y con la naturaleza a través de la experiencia de comunidad”.