Los internados del Reino Unido ofrecen una experiencia educativa única en el mundo. Y una de las cosas que los diferencia es también ¡su calendario! Es bastante diferente al calendario académico español. Os lo contamos.
El año escolar se divide en 3 trimestres:
Cada trimestre escolar incluye vacaciones a mitad del mismo (half term) y al final de cada uno de ellos (end of term).
Este sistema, si bien puede tener un enfoque diferente al de otros países, trae consigo una serie de beneficios y desafíos tanto para los estudiantes como para sus familias. Como padres, comprender estos aspectos es crucial para apoyar a nuestros hijos en su aventura educativa en el extranjero.
Estos periodos vacacionales regulares ofrecen la oportunidad de reunir a la familia con frecuencia, permitiendo que los lazos familiares se mantengan fuertes a pesar de la distancia. Estos momentos juntos pueden ser fundamentales para el apoyo emocional del estudiante, brindándole un respiro necesario del riguroso ambiente académico. Habitualmente, cuando nuestros hijos están de vuelta en España, tendemos a pasar más tiempo de calidad con ellos, reforzando los lazos afectivos con hermanos, padres y abuelos, ofreciendo un espacio para el diálogo y la conexión emocional.
Los descansos del calendario escolar son una excelente oportunidad para que los padres participemos activamente en la educación de nuestros hijos, ya sea repasando material del colegio, explorando nuevos intereses o simplemente leyendo juntos. Esto puede ayudar a los estudiantes a mantener una continuidad en su aprendizaje y a aplicar lo que han aprendido en un contexto familiar. Además, podremos seguir fortaleciendo sus valores según las enseñanzas que cada uno queramos transmitirles en casa.
Para los estudiantes internacionales, volver a casa durante las vacaciones es también una oportunidad para reconectar con su cultura de origen, idioma y tradiciones. Esta dualidad cultural enriquece su desarrollo personal y les ofrece una perspectiva más amplia del mundo. Esto, además de darles una formación más completa, ayuda a mejorar su adaptabilidad a cualquier situación y cultura nueva que se encuentren en el futuro.
Las vacaciones son vitales para la salud mental y el bienestar general de los estudiantes, ofreciéndoles un necesario respiro del intenso ritmo académico. Recargar energías, reducir el estrés acumulado y volver a sus estudios con una mente más clara y renovada son también algunos beneficios de este descanso, además de disfrutar en sí de estas vacaciones como momento para disfrutar de hobbies e intereses personales.
La experiencia de vivir lejos de casa, junto con el regreso periódico al hogar, fomenta un equilibrio único entre independencia y conexión familiar, preparando a los estudiantes para futuros desafíos de vida. Al estar lejos del núcleo familiar, nuestros hijos aprenden a gestionar su tiempo, recursos y decisiones personales de manera más autónoma. Este proceso de maduración no solo fortalece su autoconfianza, sino que también les enseña a valorar y mantener su conexión con la familia, equilibrando su creciente independencia con la importancia de los lazos familiares.
El tiempo libre puede ser utilizado para participar en campamentos, viajes educativos o deportivos, como el esquí o programas de voluntariado. Estas experiencias no solo complementan su formación académica, sino que también contribuyen a su desarrollo personal, expandiendo su visión del mundo y preparándolos para futuras carreras y retos.
La transición constante entre el hogar y el internado enseña a los estudiantes a adaptarse a diferentes entornos y situaciones, una habilidad crucial en un mundo en constante cambio. Esta resiliencia y versatilidad serán activos valiosos en su vida personal y profesional futura.
Las vacaciones también ofrecen la oportunidad de fortalecer y expandir redes sociales, tanto en el ámbito local, manteniendo la relación con sus amigos de España, como internacional, con los compañeros de su boarding school en Reino Unido. Estas redes, cultivadas desde una edad temprana, pueden ser determinantes en el desarrollo de carreras internacionales y en la construcción de un futuro profesional exitoso.
Aunque el calendario escolar de los internados británicos presenta muchas oportunidades de enriquecimiento a ambos lados de la experiencia, también presenta algunos desafíos, como:
Para algunas familias, el ajuste a este calendario puede ser todo un reto. Los viajes frecuentes pueden ser agotadores y encarecen el programa, y la constante transición entre el hogar y el internado puede generar estrés tanto para los estudiantes como para los padres.
Coordinar las vacaciones, especialmente para los padres que trabajan o tienen otros hijos en diferentes sistemas escolares, puede ser complicado. Esto requiere una planificación cuidadosa para maximizar el tiempo en familia sin interferir con las responsabilidades laborales o académicas.
Los estudiantes pueden experimentar un desajuste entre sus expectativas de las vacaciones y la realidad de ellas, especialmente si regresan a un hogar donde la rutina diaria no coincide con la vida en el internado. Adaptarse a estas diferencias puede requerir tiempo y paciencia.
A través de las experiencias de miles de alumnos que han viajado al extranjero con nosotros, podemos asegurar que frente a la necesidad de una planificación cuidadosa y la adaptación a un ritmo de vida más segmentado, los beneficios ofrecen un contrapeso muy significativo que equilibra la balanza hacia los beneficios sin ninguna duda. La clave para las familias radica en la planificación y la comunicación, asegurando que el tiempo pasado juntos sea de calidad y que se aborden los desafíos de manera colaborativa.
Somos un equipo de consultores de educación con amplia trayectoria en el sector. Ayudamos a familias y profesionales de la educación a desarrollar un plan estructurado para sus hijos o alumnos. #transparencia #educacioninternacional #expertoseneducacion