Una de las primeras palabras que escucháis cuando os informáis sobre un año académico en Reino Unido es “guardian”. La figura del guardian, sobre la que tanto hablamos en esas sesiones de consultoría educativa, constituye un apoyo para todos los padres cuyos hijos estudian en Reino Unido. Y es que la primera salida de un hijo menor de edad al extranjero genera ciertas dudas o incluso miedos, porque queremos que esté bien cuidado no solo dentro del colegio, sino fuera del mismo también y queremos estar tranquilos sabiendo que tenemos a alguien de confianza en el país de destino para poder ayudarlo ante cualquier eventualidad.
Además, el servicio de Visados e Inmigración del Reino Unido y la mayoría de los colegios (boarding schools) necesitan que aquellos estudiantes cuyas familias vivan fuera del país tengan un tutor legal, residente en el Reino Unido, que actúe en su nombre durante su estancia allí.
Tened en cuenta que el guardian es más que un tutor legal: también se ocupa de que los estudiantes se encuentren bien durante su estancia, de que cuenten con un ambiente seguro y adecuado, e incluso de que su rendimiento académico sea el mejor, por lo que no querremos que cualquiera se ocupe de esta función, y es más que recomendable que tenga la formación y reconocimiento legal adecuado. A continuación, os indicamos las funciones principales que desempeña el guardian.
Un education guardian en el Reino Unido es un adulto, que reside en el país, elegido por los padres del estudiante menor de edad, para que sea su representante mientras estudia allí.
Todos los guardians son seleccionados minuciosamente y reciben una formación específica para garantizar el bienestar de los estudiantes.
Los estudiantes pueden tener la oportunidad de conocer a su guardian previamente en una entrevista por Skype y personalmente cuando lleguen al país de destino.
Las principales tareas del guardian son:
Entre otras tareas, los guardians también pueden ayudar con la inscripción del colegio, con los avisos de llegada e inicio de curso e incluso contar con un teléfono de emergencias 24 horas. También hacen varias visitas al año y llevan a cabo un informe académico y personal del estudiante.
La figura del guardian también puede colaborar con la organización del viaje y alojamiento de los padres que quieran visitar a sus hijos durante el curso y servir de intermediario entre el colegio, el estudiante y los padres.
Como ayuda extra, los guardians ofrecen su colaboración en los encuentros entre los padres y las familias de acogida. También se pueden encargar de que una persona recoja al estudiante directamente del avión y vaya acompañado en el control de aduana hasta le llegada al destino, o acompañado hasta el avión de vuelta.
Durante las vacaciones pueden ayudar con la organización de cursos de idiomas en el Reino Unido u otras actividades.
Una parte importante de las tareas del guardian es encontrar una familia de acogida para el periodo vacacional, cuando los estudiantes terminan el colegio. Estas familias de acogida son elegidas minuciosamente y visitadas con frecuencia.
Generalmente, los padres pueden y quieren conocer previamente a las familias de acogida donde se quedarán sus hijos (aunque es importante planearlo con antelación) y los guardians intentarán que las familias estén lo más cerca posible del colegio, así como de llevarlos y recogerlos de vuelta al mismo.
Idealmente, cada estudiante mantendrá la misma familia de acogida durante toda la estancia.
Los guardians se asegurarán de que una persona de confianza recoja al estudiante a la llegada al aeropuerto. De antemano, se comprueba que estos conductores son personas responsables y la seguridad de los estudiantes está garantizada en todo momento. Incluso es posible que se envíe a los padres la información del conductor (con una fotografía y su número de teléfono). Algunos padres prefieren la opción de usar el transporte que provee el propio colegio y los estudiantes pueden viajar en tren si son mayores de 16 años.
Los costes de un tutor legal en el Reino Unido pueden variar desde unas £695 hasta £3.900 al año. Además, se suele pedir un fondo de gastos de unas £500 por trimestre para cubrir los gastos de la familia anfitriona y viajes, que, si no son necesarios, se devuelven en su totalidad.
En caso de buscar una empresa o institución para contratar un guardian es aconsejable que esta sea acreditada por AEGIS (Association for the Education and Guardianship of International Students). Esto significa que las gestiones y procesos a la hora de elegir un tutor legal para nuestro hijo, han sido inspeccionados y auditados por esta importante organización.
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